Ictericia, «esa dorada preocupación «

Luego de meses de espera, tu bebé ya está en casa, inician juntos una
intensa etapa de aprendizaje. Lactancia, sueño, pañales… y de pronto notas
que su piel se torna dorada…Esta situación recibe el nombre de Ictericia. Es
importante realizar la consulta médica ante cualquier situación que genere
dudas, ésta es una de ellas.
Ictericia es la coloración amarillenta de piel y mucosas, debido al
depósito del excedente de bilirrubina, al metabolizarse los glóbulos rojos,
cuando alcanza valores muy elevados resulta tóxica y da lugar a una
enfermedad peligrosa llamada Kernickterus. Cuando el inicio de la Ictericia es
precoz (en las primeras 48 hs de vida), la llamamos Ictericia No Fisiológica, se
asocia a situaciones más complejas como incompatibilidad sanguínea,
hematomas, enfermedades congénitas y requieren un abordaje médico
temprano para su tratamiento, por los riesgos que conlleva. Si el inicio de la
misma es tardío (posterior a las 48hs de vida), hablamos de Ictericia
Fisiológica, situación que esperamos encontrar en el 60% de los recién nacidos
a término y en el 80% de los prematuros. En esta categoría hay dos
circunstancias: La primera es Ictericia por Lactancia, aquí tenemos un bebé de
2-5 días de vida con piel y ojos amarillentos (esta progresión va desde la
cabeza hacia los pies), con pérdida de peso marcada, que moja menos de 5
pañales por día y se encuentra quisquilloso, difícil de calmar entre tomas o
somnoliento; su causa es la disminución de la eliminación de bilirrubina a
través de las heces en un niño que se alimenta de forma deficitaria, por ello el
tratamiento consiste en corregir los problemas de lactancia y vigilar al bebé de
cerca, algunos casos requerirán de internación para recibir fototerapia. La
segunda situación es la Ictericia por Leche Materna, aquí hay un bebé
amarillento de casi una semana de vida, con adecuado progreso de peso, con
buena actitud alimentaria y al que se le cambian 8 o más pañales por día,
entonces ¿Por qué se produce? Es probable que se deba a una mayor
absorción de la bilirrubina en el intestino del niño/a y que la leche materna
incremente esta situación. Lo importante es saber que se trata de una
condición benigna y que se debe continuar amamantando. La leche materna es
siempre la mejor opción, brinda toda la nutrición, protección y sostén que el
niño necesita.

Los primeros días de vida del bebé representan un desafío permanente,

requieren una red que sostenga a la nueva familia, donde el pediatra, el asesor

de lactancia, la familia, los amigos y los grupos, brinden todo el apoyo, claves

para el bienestar de la madre y su bebé.

Dra. Verónica Gabriela García
Medica Nutricionista. MP 8268. IBCLC L- 309324. @dravglactancia


Referencias:- Protocolo clínico de la ABM #22:”Guia para el manejo de la Ictericia en el
Lactante Alimentado al Seno Materno, de 25 o mas semanas de gestación”.Academy
of Breastfeeding Medicine.Revision 2017.(acceso Abril 24, 2023).

-Lawrence,R y R.”Breastfeeding.A Guide for the medical profession”.Eighth
Edition.2016;6,7,8,11:194-338.