Sofía Bonaparte. Lic en Enfermería, IBCLC
Siempre me gusta compartir la idea que si por regla biológica fuera necesario contar con un extractor de leche, éste, nacería junto a bebé en el parto.
El extractor mecánico o “sacaleche” es una herramienta más de las que existen para utilizar en determinadas situaciones a lo largo de la lactancia. Es la tecnología que acompaña al ser humano para facilitar, ayudar o acompañar una necesidad especial o una elección diferente para la alimentación del lactante.
A veces se convierte en el mejor aliado, algunas otras, pasa sin penas ni gloria, y en otros casos es el enemigo o el peor recuerdo de la lactancia.
No hay que perder de vista que supone una intervención, que su uso desencadena un comportamiento del cuerpo a través del estímulo físico y hormonal impactando en la producción y que es necesario contemplar o planificar previo a su utilización.
Hay aparatos de extracción mecánica manual, eléctrica o a batería. Hay simples o dobles. Cada uno tiene un valor y una funcionalidad específica que se adapta o se prefiere dependiendo la situación.
A diferencia con la extracción manual, la mecánica, intenta asimilar el acople del bebé tomando el complejo areola pezón, generando presión negativa. Los eléctricos, ofrecen además patrones de succión con distintas intensidades y en el caso de los dobles, aumentan los niveles hormonales y aceleran los reflejos de eyección.
También, los extractores suelen disminuir el tiempo de extracción; no tienen efectividad para remover el calostro, poseen componentes que se necesitan ser limpiados y esterilizados y tienen un valor económico elevado.
Los estudios demuestran que, en situaciones de necesidad, la extracción mecánica favorece la producción y la alimentación con leche humana más tiempo comparado con la extracción manual.
¿Qué es importante plantearnos antes de la elección del extractor y de su uso?
- ¿Para qué lo vamos a utilizar? Para estimular una mayor producción o sostenerla, extraer para complementar, por una internación o separación, para armar banco de leche, para alimentar en forma diferida o para donar. Por elección o necesidad.
- Plan de acción: Determinar qué volúmenes son necesarios y con que extractor se realizará. En base a eso, armar la planificación más amigable posible con la rutina diaria y particular de cada familia.
Entonces, siempre la recomendación es sacar lo necesario, sostener el equilibrio natural y buscar apoyo que contemple la particularidad.
Referencias
Lawrence MD, Lawrence R. Breastfeeding: A guide for the medical profesión. 8th ed. Elsevier.2019
Kent JC, Prime DK, Garbin CP. Principles for maintaining or increasing breast milk production. J Obstet Gynecol Neonatal Nurs. 2012; 41(1): 114-21.
Meier PP, Patel AL, Hoban R, Engstrom JL. Which breast pump for which mother: an evidence-based approach to individualizing breast pump technology. J Perinatol. 2016;36(7):493-9.